Resumen:
Los principales stocks comerciales de peces e invertebrados marinos alrededor del mundo se encuentran severamente explotados con fuertes tendencias hacia el colapso (Myers & Worm, 2003; Pauly el al., 2005; Worm el al., 2009; Christensen el al., 2014a). Esto pone en riesgo la integridad y la salud de los ecosistemas marinos (Pikitch et al., 2012), así como su contribución a la seguridad alimentaria mundial. Las bases para alcanzar la sostenibilidad pesquera han sido trabajadas formalmente por décadas y éstas han sido recogidas por diversas instituciones de relevancia mundial a manera de recomendaciones de gestión (FAO, 1995; FAO, 2003). Sin embargo, su adopción por países pesqueros y su traducción en acciones concretas para fomentar la sostenibilidad en el manejo pesquero, aún es muy limitada (Pitcher et al., 2006; Pitcher et al., 2009; De la Puente & Sueiro, 2013). En esa línea, cuando los sistemas de manejo pesquero no generan los incentivos económicos adecuados, los agentes pesqueros (pescadores y empresarios) no buscan proteger a los recursos y se fomenta la sobreexplotación (Gordon, 1954). Tan es así que diversos autores sugieren que una de las causas subyacentes del colapso de los stocks radica en el "acceso abierto" y la "propiedad común" en las pesquerías (Gordon, 1954; Hardin, 1968; Bjerndal & Conrad, 1987). En pesquerías de "acceso abierto", todos los que quieran pueden pescar (Aranda, 2009b). Por lo tanto, los peces e invertebrados son bienes públicos donde la renta que éstos generan en el mar antes de ser capturados no puede ser apropiada por ninguno de los actores que luego los extraerán (Gordon, 1954). Al no contar con propiedad sobre los recursos, los incentivos por protegerlos desaparecen (McCay el al., 1995; Grafton el al., 2006), ya que cada agente pesquero compite fuertemente y sólo busca maximizar sus ganancias (Grafton el al., 2007). Con el pasar del tiempo, se incrementan las capturas y se reduce la duración de los periodos de pesca (Hilborn el al., 2005), situación que comúnmente culmina con niveles de extracción insostenibles y la disipación de la renta (Gordon, 1954; Hardin, 1968; Bjerndal & Conrad, 1987). La principal pesquería peruana, la pesquería industrial de anchoveta (Engraulis ríngens), recientemente ha dejado atrás un régimen de acceso abierto para pasar a un sistema basado en derechos, con cuotas captura asignadas individualmente a cada embarcación (Aranda, 2009a). Esta investigación tuvo como objetivo evaluar el impacto de este nuevo sistema de ordenamiento pesquero, recogido en el Decreto Legislativo No. 1084 (DL 1084) Y su reglamento, en el comportamiento de la flota industrial de cerco que captura anchoveta (Engraulís ringens) con fines de consumo humano indirecto (CHI) en la zona Norte-Centro del mar peruano. Para tal fin se definieron variables respuesta que nos permitieron comparar cambios en la capacidad de pesca de la flota, en el esfuerzo de pesca que esta genera, en la duración de las temporadas, en los desembarques de anchoveta y en la eficiencia de captura de la flota, antes y después de la implementación del DL 1084. También se realizaron comparaciones, usando estas variables, entre las embarcaciones de madera y acero que conforman la flota con el propósito de determinar si este nuevo sistema de ordenamiento afectaba de manera diferente a las embarcaciones según tamaño y tipo. Mediante el análisis de los resultados de esta investigación podemos afirmar que la implementación del Decreto Legislativo No. 1084 (DL 1084) generó cambios en el comportamiento de ta flota lndustrial de cerco que opera en la zona norte centro del mar peruano capturando anchoveta con fines de consumo humano indirecto. La transición del sistema de ordenamiento pesquero del acceso abierto hacia los derechos de acceso individuales producto del DL 1084, afectó la capacidad de pesca de la flota, reduciendo manera significativa su Capacidad Operativa. Sin embargo, esta reducción no fue suficientemente importante para reducir el exceso de capacidad de la flota. No obstante, la reducción de su capacidad operativa contribuyó a incrementar significativamente la duración de las temporadas de pesca, así como el número de días de pesca efectiva dentro de ellas. Esto a su vez, permitió que el esfuerzo pesquero diario (estimado a través de la Capacidad Desplegada Diariamente por la flota) y los desembarques diarios se redujesen de manera significativa, permitiendo que la extracción de anchoveta se realice a tasas más bajas a lo largo de las temporadas de pesca. Vale la pena resaltar también que no se redujo el esfuerzo pesquero total por temporada como se esperaba. Ello se explica debido a que la asignación inicial de los Porcentajes de Captura Por Embarcación no fomentó el recorte de la capacidad total de la flota a través de la concentración de la propiedad y la depuración de las embarcaciones menos eficientes. Adicionalmente, el nuevo sistema de ordenamiento presenta reglas que limitan la transferibilidad de los derechos individuales asignados, y la salida de embarcaciones de la flota a través de figuras como el parqueo y la nominación de las mismas. La reducción progresiva de la eficiencia de captura, luego de la implementación del DL 1084, es un comportamiento opuesto al esperado. Este se explica debido a que el marco legal vigente ha vulnerado la exclusividad en el acceso a los derechos individuales asignados a los armadores industriales, así como a la estabilidad y la seguridad de las reglas del ordenamiento pesquero, y ha limitado la salida de las embarcaciones menos eficientes de la flota. Ello junto a la ausencia de un sistema de control, fiscalización y sanción efectivo, que permita disuadir prácticas pesqueras ilegales, habría conducido al desarrollo de incentivos perversos que atenten contra la eficiencia de la flota y posiblemente la sostenibilidad de la pesquería. Las embarcaciones de acero y madera responden de manera similar (misma tendencia) luego de la implementación del DL 1084. Sin embargo, la magnitud de los cambios difiere en algunas variables.