Introducción: La enfermedad de Chagas sigue siendo un reto en parte debido a la limitada eficacia de su tratamiento. En Arequipa, donde se ha reducido notablemente la infestación doméstica por Triatoma infestans, la prevención de la reinfestación sigue siendo un reto debido a la renuencia de la población. Comprender las motivaciones de la comunidad para participar, a menudo vinculada al cuidado de los niños pequeños, es fundamental para mantener una vigilancia vectorial eficaz. Objetivo: Evaluar si la presencia de niños menores de cinco años en los hogares de Arequipa está asociada con reportar la presencia de Triatominos entre el 2010 y el 2018. Métodos: Estudio de casos y controles derivado del programa de vigilancia entomológica de Triatoma infestans en Arequipa. El programa de vigilancia recibe reportes de la población respecto a la presencia de Triatominos y responde haciendo inspecciones y fumigaciones con insecticidas de efecto residual. Se usaron las pruebas de Chi-cuadrado y Mann-Whitney-Wilcoxon para el análisis bivariado entre la presencia de niños menores de 5 años en el hogar y el reporte de la presencia de Triatominos. Se usó una regresión logística múltiple para establecer la asociación, esta se ajustó por cluster de viviendas asociadas a un reporte y se controló por covariables y confusores de interés. Resultados: Se analizaron los datos de 314 viviendas. En el 39.5% de viviendas en las que se reportó la presencia de vectores de Trypanosoma cruzi, el programa de vigilancia comprobó la infestación a través de una inspección a la vivienda. En la mayor parte de las viviendas enlas que había presencia de niños en casa, se reportó la presencia de Triatominos (77.3% en viviendas con menores de 5 años y 85.2% en viviendas con niños entre 6 y 12 años). Aunque la presencia de niños menores de 5 años no tuvo una relación estadísticamente significativa con el reporte de Triatominos (OR:1.35 IC95%: 0.50 – 3.65), la presencia de niños entre 6 y 12 años se asoció positivamente con reportar la presencia de insectos vectores de la enfermedad de Chagas en las viviendas (OR: 2.39 IC95%: 1.18 – 4.83). Finalmente, la falta de tiempo fue el principal motivo por el cual los pobladores no reportaron la presencia de Triatominos (48.2%). Conclusiones: La presencia de niños menores de 5 años no es un factor que incremente significativamente la participación en la vigilancia vectorial de Triatominos. Se sugiere identificar otros motivadores, así como realizar campañas de difusión para mejorar la participación comunitaria en la detección y eliminación de focos de infestación en Arequipa.Introduction: Chagas disease remains a challenge in part due to the limited effectiveness of its treatment. In Arequipa, where household infestation with Triatoma infestans has been reduce, prevention of re-infestation remains a challenge, due to the of population. Understanding community motivations for involvement, often linked to the care of young children, is critical to enhancing effective vector surveillance. Objective: To evaluate whether the presence of children under the age of five in households in Arequipa is linked to reporting the presence of Triatomines between 2010 and 2018 Methods: Case-control study derived from the entomological surveillance program for T. infestans in Arequipa. The surveillance system receives reports from the population regarding the presence of Triatomines and responds by performing entomological inspections and residual insecticide spraying. Chi-square and Mann-Whitney-Wilcoxon tests were used for bivariate analysis between the reported presence of Triatomines and the presence of children under 5 years of age in the household. Multiple logistic regression was used adjusted per housing cluster associated with a report to establish the association controlling for covariates and confounders of interest. Results: Data from 314 homes were analyzed. Among homes that reported the presence of insect vectors, actual evidence of their presence during inspections was discovered in 39.5% of cases. Most of the homes that reported insects had children under 5 years of age (77.3%) and between 6 and 12 years of age (85.2%). Although the presence of children under 5 years of age did not have a statistically significant relationship with vector reporting (OR: 1.35 CI95%: 0.50 – 3.65), the presence of children between 6 and 12 years of age was positively associated with reporting the presence of insect vectors of Chagas disease in the dwellings (OR: 2.39 CI95%: 1.18 – 4.83). Finally, lack of time was main reason why villagers did not report the presence of Triatomines (48.2%). Conclusions: The presence of children unde 5 does not appear to be a factor that significantly increases participation in vector surveillance. There is a need to identify other motivators for households, as well as to conduct awareness campaigns to improve community participation in the detection and elimination of foci of infestation in Arequipa.