El betacoronavirus humano SARS-CoV-2 causó una enfermedad pandémica relativamente nueva, cuyo primer brote se detectó en Wuhan, China, en diciembre de 2019. Este virus también afectó a varias especies animales, especialmente a mamíferos como los felinos, caninos y mustélidos. El objetivo de este estudio fue evaluar la presencia de anticuerpos contra SARS-CoV-2 en gatos domésticos de Lima que recibieron atención en clínicas veterinarias durante la pandemia de COVID-19. Para ello, se utilizó una técnica de inmunoadsorción ligada a enzimas (ELISA) para identificar anticuerpos en felinos frente a una proteína recombinante del dominio de unión al receptor de la espiga del virus. Se encontró un 43.75% (238/544) de positividad al SARS-CoV-2, siendo más frecuente en hembras, cachorros, raza Doméstico de Pelo Corto y en la zona de Lima Norte. Los resultados representan el reporte más alto registrado a nivel mundial y sugieren que una parte significativa de los gatos evaluados había tenido contacto previo con el virus durante la pandemia, cuyo componente principal fueron los propietarios con COVID-19. Esto destaca la necesidad de implementar estrategias adecuadas para reducir el riesgo de transmisión entre humanos y animales en futuras pandemias con componente animal.The human betacoronavirus SARS-CoV-2 caused a relatively new pandemic disease, with the first outbreak detected in Wuhan, China, in December 2019. This virus also affected several animal species, particularly mammals such as felines, canines, and mustelids. The aim of this study was to evaluate the presence of antibodies against SARSCoV-2 in domestic cats in Lima that received care in veterinary clinics during the COVID-19 pandemic. For this purpose, an enzyme-linked immunosorbent assay (ELISA) was adapted specifically to detect antibodies in cats against a recombinant protein of the virus's spike receptor-binding domain. Blood samples were analyzed to detect the presence of antibodies, which would indicate that the animals had been exposed to the virus. The results suggested that a significant portion of the cats evaluated had prior contact with the virus during the pandemic. Based on these findings, it was concluded that domestic cats could have played an important role in the transmission of SARS-CoV2 in urban environments. This highlights the need to implement appropriate strategies to reduce the risk of transmission between humans and animals in potential future outbreaks.